La suavidad que acompañó la dura habitación de mis dolores, alberga los colores y designios de aquellos que pretenden cambiar el mundo en un cuarto de segundo. Con un papel, lápiz y pocos años a cuestas, comencé a sentir los primeros latidos del corazón. Algo que luego entre desvelos y misterios, se fue convirtiendo en mi gran secreto. Tan así de inmenso que hoy por fin deseo compartirlo. Pero todo este sueño me produce pánico. De todas formas, ahí va…
miércoles, 8 de junio de 2011
Imagen y Semejanza
Unos cuantos bronces convertidos en monedas, eran el peso justo de la conciencia de aquel hombre sin valor, y que eran guardadas en lo más recóndito de su bolsillo; Estas monedas no eran mas que unas simples migajas de pan, que habían sido recortadas de su amargo salario mensual.
Trataba de esconderlas, arropaditas en el “bolsillo e´ perra”, para así conservar los signos por los cuales hoy se encuentra vivo; Una cara y un número.
De esta manera, ese hombre rinde culto sagrado a estos códigos, día y noche, a sol y a sombra, los cuales a diario van tallados en su frente, al igual que esas monedas, a su imagen y semejanza.
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